viernes, 3 de mayo de 2013

Susan George "La clase de Davos es quien dicta las politicas de austeridad"


Entrevista publicada 7 marzo 2013 en www.cronicapopular.es por:
Paula Guerra.
Periodista.

Hace doce años la politóloga y activista franco-americana, presidenta de honor de Attac, Susan George, escribió El informe Lugano, un libro sobre el capitalismo y sus más acérrimos defensores, el poder económico mundial, del que en España se han vendido hasta ahora 14 ediciones. Mezclando realidad y ficción, o como diría la propia autora, haciendo un ejercicio de ficción factual, El informe Lugano se presentaba a los lectores como una curiosa mezcla de ensayo y novela, en donde la ficción era utilizada hábilmente por George para desvelar las crueldades del sistema neoliberal, desde la visión de los propios capitalistas: un organismo llamado Grupo de Solicitantes (el poder económico mundial) encomendaba a un Grupo de Trabajo (intelectuales pro capitalismo), la tarea de responder a la siguiente pregunta: “¿Cómo puede el capitalismo no sólo seguir funcionando, sino continuar fortaleciéndose , e incluso hacerse invulnerable, en el Siglo XXI?.

Están vaciando la democracia y lo hacen a través de meterse en la cabeza de las personas. No podemos darnos la oportunidad de no luchar. ©Juanjo Delapeña

La respuesta a esa pregunta fue El informe Lugano, un libro que, más allá de la ficción (la existencia del Grupo de Solicitantes y el Grupo de Trabajo constituyen una licencia literaria de George), mostraba, a través de cifras y datos reales, cuáles eran los tres retos a los que se enfrentaba el capitalismo si quería continuar su avanzada predadora: el medio ambiente, la gestión de la sociedad y las finanzas.

Doce años después, continuando el estilo de realidad factual, George presenta El Informe Lugano II. Esta vez, vamos a liquidar la democracia, editado en España por Deusto.

La pregunta que debe responder ahora el Grupo de Trabajo es si vivimos una progresión inevitable de crisis y caída final del mundo occidental, o si estamos ante un renacimiento del sistema capitalista”… ¿hacia dónde se inclina la balanza?

Si el poder económico mundial mantiene su esfuerzo por controlar la mentalidad de la gente, y sigue enmascarando lo que realmente están haciendo, podrán hacer que el sistema siga funcionando. Pero primero pero tienen que tomar algunas decisiones. Por ejemplo, tienen que comprobar cuánto nivel de desigualdad están dispuestas a soportar las sociedades. El libro explica cómo están actuando y hasta qué punto pueden llegar a actuar. Las diferencias entre clases aumentan cuanto mayor es la desigualdad en una sociedad, y eso se puede convertir en un peligro desde el punto de vista social y político.

La lucha de clases, una realidad

A propósito de clases, Warren Buffet, el tercer hombre más rico del mundo, señaló en un artículo que publicó en 2011 que la lucha de clases sigue existiendo y que es su clase la que está ganando. Resulta paradójico que un multimillonario hable de lucha de clases, mientras personas de las capas más desfavorecidas de la sociedad se nieguen a hablar en estos términos

Creo que es porque Carlos Marx no está ‘”de moda. La lucha de clases es una expresión que parece un poco antigua, pero es una realidad. Es una lucha que se está dando en Europa y en Estados Unidos. Después de la Segunda Guerra Mundial, amparadas por el estado de bienestar, las capas medias de la sociedad subieron su nivel adquisitivo y obtuvieron determinados beneficios y derechos. Esto hizo que perdieran sus intereses de clase. Estos beneficios continuaron hasta que la ‘”clase de Davos dijo: ya está bien con esto, estamos perdiendo dinero.

¿La clase de Davos es la que usted denomina la clase social internacional?

Sí, son una nueva clase social. Es un fenómeno nuevo en la historia. Antes no teníamos una clase dirigente internacional. Son una clase social nómada, pueden vivir en cualquier parte del mundo, en Rusia, en China, en España, tienen distintas nacionalidades y el inglés es su idioma vehicular. No sólo comparten dinero y poder, además comparten los mismos espacios sociales: esquían en los mismos lugares, se van de vacaciones a los mismos sitios, asisten a los mismos encuentros -el Club de Bilderberg, por ejemplo-, poseen casas en Londres, en Francia Al contrario de la nobleza, donde todo permanece inalterable, esta es una clase social que está en permanente cambio. Allí están los principales banqueros, empresarios y algunos políticos. Sus miembros se van alternando en función de su estado financiero.

Estos poderosos, que deciden las políticas económicas en el mundo, ¿son unos ignorantes de la economía que se creen su discurso neoliberal -tal como afirman los economistas Krugman y Stiglitz- o, por el contrario, saben perfectamente lo que están provocando con sus decisiones?

Krugman y Stiglitz afirman que esta gente es tan estúpida o ignorante que, sin saberlo, se están precipitando hacia un suicidio económico Pero ¿estamos ante una serie de errores de personas que no saben de economía, o estamos ante unas políticas deliberadas? Yo no creo que sean estúpidos, creo que saben muy bien lo que están haciendo. Son la clase dominante, son la clase de Davos. Son los que dictan las políticas de austeridad según los intereses empresariales y financieros que más les convengan.

La gente debe reconocer que no pueden esperar más de sus gobiernos y que son ellos los que tienen que moverse. ©Juanjo Delapeña

Suena a una gran conspiración internacional

No creo que existan conspiraciones que gobiernen el mundo. Sin embargo, creo en la fuerza de intereses compartidos, particularmente cuando quienes comparten estos intereses están dispuestos a defenderlos y tienen el poder para hacerlo.

Movimientos sociales, una alternativa

El informe Lugano II habla de una guerra de paradigmas entre el Modelo Ilustrado (MI) y el Modelo Económico Elitista Neoliberal (MEN). El segundo parece estar ganando la batalla

El modelo ilustrado es un modelo democrático que tiene un estado de bienestar y valores como la igualdad, apoyo a la cultura y a la investigación. El modelo que defiende la clase de Davos no es éste, ellos defienden el MEN. Un modelo que dice que si eres pobre, es tu culpa; que si no tienes trabajo, es tu culpa. Este modelo sustituye los valores del Modelo Ilustrado, que son compartidos por la mayoría de las personas, por unos “‘principios que repiten y reafirman incansablemente: los mercados son sabios, las empresas privadas son más eficaces, si trabajas duro llegarás lejos, el gobierno no te tiene que dar nada, etc. Están vaciando la democracia y lo hacen a través de meterse en la cabeza de las personas. No podemos darnos la oportunidad de no luchar.

¿Cómo pueden los ciudadanos ganar esta batalla?

A través de la acción. La gente debe reconocer que no pueden esperar más de sus gobiernos y que son ellos los que tienen que moverse. Esto significa que la gente debe estar más unida, que debe ser más determinante. El mejor consejo para los movimientos sociales es que formen alianzas y coaliciones con toda la sociedad civil, con asociaciones de mujeres, con organizaciones medioambientales, incluso con pequeñas y medianas empresas. Nunca hemos contactado con las organizaciones de pequeños empresarios y ellos también están padeciendo la crisis. La unión debe ser de todos los que están sufriendo los efectos del capitalismo.

Una activista incansable
 
 

Susan George nació en 1934, en Ohio, Estados Unidos. A los 21 años emigró a Francia, donde adquirió la nacionalidad en 1994. Licenciada en Filosofía por la Sorbona y doctora en Ciencias Políticas por la Escuela de Estudios Superiores de Ciencias Sociales de la Universidad de París,  es una de las más importantes activistas del movimiento antiglobalización. Ha formado parte de Greenpeace Internacional y, actualmente, es presidenta de honor de ATTAC Francia. Su trabajo ha estado enfocado en una constante: la preocupación por la precariedad y las desigualdades del actual modelo económico. Desde que en 1976 escribió su primera obra Cómo muere la otra mitad: las razones reales del hambre en el mundo, Susan George ha plasmado sus teorías en diez libros, varios de ellos traducidos al español  como el primer Informe Lugano, Sus crisis, nuestras soluciones, y Otro mundo es posible si…” editados por la Fundación Intermón Oxfam e Icaria.

1 comentario:

  1. El problema mayor es la falta de solidaridad. Con ello cuenta esa política neoliberal. La gente en masa se agolpan en los conciertos y son capaces de pagar el triple por las entradas pagadas en la puerta. Se agolpan y se medió matan en los partidos de football. Se desplazan en masa para ver al papa, una procesión o un representante del celuloide pero a la hora de hacerlo por defender sus derechos, parece que se dicen, aunque consideró que me explotan, esto es mejor que nada. El que tiene un buen empleo dice, ese no es mi problema, y así nos va. La sociedad esta adormecida, nos han vuelto materialistas e irresponsables. Quizás nos tienen que estrangular del todo para que reaccionemos, desgraciadamente es entonces que se producen las revoluciones y el saldo son las pérdidas de vida.

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