miércoles, 2 de abril de 2014

PARA HACER UNA REVOLUCION


Artículo de Antonio San Román Sevillano publicado en El diario con fecha 24/3/2014

Para hacer una revolución se precisa algo más que una crisis económica, un descontento social generalizado y la frustración de las ambiciones políticas y sociales de los grupos políticos que buscan cambiar el sistema social. Tiene que haber una ideología unificadora que dé cohesión social al descontento de clases generales tan heterogéneas y a las aspiraciones de grupos políticos tan diversos que se diferencian tan sólo en aquello del frente nacional de liberación judaico y frente judaico de liberación nacional –Monthy Pyton y Juan Carlos Monedero, en uno, dixit- o, lo que es lo mismo, la mayoría de las veces en la egolatría de los dirigentes de cada grupúsculo, como acabamos de ver en IU. Hay que “matar” a los burócratas de los partidos. Nadie debe acomodarse en un cargo para siempre.

Se precisa, ante todo, la unión de tanto frente de liberación. Generosidad en la renuncia. Abiertos sin temor al abrazo a lo común, a la comunidad. Hay que sentarse en una mesa redonda con honestidad, cara a cara, para poner en un mismo programa los puntos en común a favor y los que no queremos para la nueva colectividad que queremos construir. Hay una sociedad muy concreta fuera del cenáculo de tanto grupúsculo. Y, por tanto, se deben hacer proposiciones que ilusionen y no asusten, que no provoquen el rechazo de esa ciudadanía, que espera soluciones y no más problemas. El proyecto de partido es un proyecto para un partido. El proyecto final debe ser un proyecto de y para todos. Como escribe, Callinicos: <<… toda alternativa al capitalismo en su forma actual debería, en la medida de lo posible, satisfacer, como mínimo, los requisitos de justicia, eficiencia, democracia y sostenibilidad>>. La sociedad en marcha debe legitimar el proyecto. No hay que proponerse vencer tomando el Palacio de Invierno o Parlamento en una noche por la fuerza. Hay que convencer para poder, realmente, vencer.

Nuestra revolución no tiene porqué hacer saltar el país del antiguo régimen al nuevo. Porque si saltamos sin haber convencido, nos dejaremos atrás a la mayoría social, temerosa ante lo desconocido. Avanzar juntos, despacio, pues vamos lejos, aquel lema del 15M.

Ante todo, no proponer la violencia como solución, que por temor es rechazada por la mayoría social. Y porque, sobre todo, quien realmente posee los recursos verdaderamente violentos es quien está ejerciendo el poder. Los poderes establecidos pueden aplastar un movimiento por el cambio mediante la represión directa y el poder judicial (Alex Callinicos). Si la ejercemos nosotros, frente a esa violencia institucional, una vez más, nos espera el fracaso. La violencia consustancial a toda lucha revolucionaria, en la nuestra sólo debe manifestarse en el campo de lucha de lo simbólico.

Por ello, desde el principio y a media que se avance en la lucha,  se irá creando un vocabulario de esperanza y protesta, rehusando todo aquel lenguaje negativo y toda aquella acción violenta que provoque el rechazo de parte de la población que viaja con nosotros. Lo simple es lo más directo y lo más eficaz.

Se deben elegir los símbolos de la lucha, que deben ser unificadores. El movimiento social arranca en la emotividad. Hay que extraer  tales símbolos de las vivencias de la sociedad, no de las estructuras. Se es persona antes que profesor, camarero, periodista, político, agricultor, bombero, médico, etc. Hay que construir el significado de lo que vivimos en nuestras mentes en relación con nuestro entorno. Si tenemos un problema de comunicación, tenemos un problema de supervivencia. La gente somos, ante todo, emocionales. Nuestro cerebro es emocional, en primer lugar. Primero sentimos, luego racionalizamos. (Manuel Castells) El discurso debe tener sentido enunciando con coherencia la realidad que nos afecta.

Debemos nombrar al enemigo, ponerle rostro. Su identificación hace más fácil la unión de quienes luchan.

Alcanzar la unidad del precariado (hoy la antigua clase media con carrera universitaria, master, idiomas, en el paro o trabajos tan precarios que se asoman a la esclavitud) y los obreros  -canis y chonis, entre otros- (ver el excelente artículo de Nega dirigido a Pablo Iglesias), también en el paro o en un infra empleo que da sustento a la neo esclavitud. Todos, en definitiva, precariado, pues todos somos eventuales y prescindibles frente a los oligarcas. Hay que encontrar un punto de encuentro entre quienes buscan escapar de los imperativos de la actual sociedad de mercado, y los deseos consumistas de la mayor parte de la población. Rescatar para la lucha a los que ya están excluidos: desde el precariado de la clase media alta, pasando por los que están entre el curro corriente y en el umbral de la pobreza hasta los que ya están fuera de cualquier nivel visible del sistema capitalista. Éstos, están siendo emocionalmente  usados contra todos nosotros como un nivel al cual no queremos descender.

Hay que recoger la cultura popular y darle la vuelta, alcanzar convencer a la gente que el poder está en nuestras manos. Convencerlos de tomar el Parlamento a través de la política. Porque el Parlamento es una institución hecha a la medida de la proyección que nosotros queramos darle sobre nuestra sociedad. Quienes tienen el poder construyen las instituciones según sus intereses y valores. Y nosotros, la mayoría, queremos construir nuestro país –y, cuando toque,  nuestra Europa, nuestro Mundo-,  a la medida de nuestros intereses, de nuestros valores. Aspiramos a un mundo sustentado en la justicia, los Derechos Humanos como base. El Poder puede que sea global –las  transnacionales, la Troika, el G-8, sobre todo quienes están detrás de todos éstos.-, pero la política es local. Si vencemos, nosotros decidiremos la política y, por tanto, la acción política socio-económica para nuestro país. Mostrar que las soluciones técnicas son una cosa y las políticas otras. Aquéllas están supeditadas a éstas. El mercado no es un ente superior desconocido. El mercado son las tomas de decisión de los dueños de las transnacionales, de la banca, etc., sus relaciones entre ellos –sus luchas de poder- y su relación con nosotros, productores y consumidores. La Globalización económica de hoy es lo que en el siglo XIX se conocía como imperialismo. La diferencia que modifica y magnifica este capitalismo salvaje es el tipo, calidad y cualidad de las comunicaciones.

Existe una lucha de clases. Hasta los multimillonarios manifiestan y admiten en público que la van ganando. Hay que hacerla visible a través del conflicto local, primero, y mundial después, entre ricos y pobres. Hay que demostrar a los pobres porqué somos pobres, quiénes nos van empobreciendo cada día. Quieren una mano de obra servil, tan infra pagada como privada de las garantías y los derechos más elementales. La neo-esclavitud. Al comenzar el siglo XXI el número de pobres estaba aumentando a un ritmo de casi medio millón por semana. No podemos dejar de ver y mostrar que en nuestro país, y todos los de nuestro entorno, la diferencia entre los ricos y los que no lo somos no deja de aumentar. Y se abisma entre nuestro mundo -el sur de occidente-, y el sur del mundo, ¡África, como ejemplo, tan cerca y tan lejos!

Buscar la adhesión y, sobre todo, la colaboración creativa de cuantas más mujeres mejor. Si la mujer cambia de mentalidad, las relaciones sociales cambian. La mujer es el mayor motor para el cambio de mentalidades.

Rescatar de la nostalgia los buenos recuerdos de sueños y luchas de juventud de los mayores de cincuenta años. A los más jóvenes hay que proponerles la construcción conjunta para todos de sus elevados sueños.

Hay que mostrar a todos lo que no se dice en los medios bajo la publicidad y propaganda de políticos y mercados.

Proponer la subversión permanente, porque la realidad nueva, cuando llega, llega con voluntad de permanecer, de fosilizarse, de instituirse como verdad absoluta. Y eso siempre significa la derrota. Nada ha de inscribirse en piedra, pues la vida es movimiento perpetuo, y sus necesidades y requerimientos son mutables. Las mentalidades de acero crean sociedades rígidas, prontas a la parálisis, con falaces estructuras que aprisionan a quienes las componen. Una subversión anti-totalitaria en nombre de los derechos humanos, en nombre de la justicia para construir la libertad.

No recuerdo quien dijo o escribió: Piensa globalmente, actúa localmente. ¡Podemos, claro que podemos! Hasta arrojarlos en el mar para rescatar nuestros náufragos y construir un espléndido futuro para todos.

lunes, 17 de marzo de 2014

Banca y Banco España: la manipulación permanente de los balances


Resumimos del artículo de Roberto Centeno en El Confidencial de fecha 17.03.2014

Una de las causas más importantes del desastre económico en el que nos encontramos ha sido la actuación del Banco de España. No sólo ha incumplido flagrantemente su función, motivo suficiente para haber destituido a toda su cúpula directiva; sino que su actuación puede calificarse justamente de delictiva, en el sentido de que su gestión ha causado un gravísimo perjuicio a la nación y lo sigue causando a día de hoy. El Banco de España pudo haber evitado lo peor de la crisis sólo con haber cumplido sus obligaciones.

En España sucede lo que en ningún país civilizado. Todo el poder está copado por el Rey, los dos partidos hegemónicos y la oligarquía financiera. Este poder omnímodo –los nuevos señores de horca y cuchillo– está chantajeando al duopolio televisivo A3-La Sexta y Telecinco-Cuatro, con la amenaza de quitarle nueve canales, retirarle toda la publicidad institucional –la controlada por la banca y volver a permitirla en la televisión estatal– si no pasan por el aro de la adulación y el apoyo incondicional a dicho poder absoluto. Los medios de la Iglesia, COPE y 13TV, bajo el nuevo mando de monseñor Blázquez, han recibido órdenes de eliminar de raíz en noticias y tertulias todo vestigio de crítica  a las oligarquías y al Rey. Delenda est veritas.

Las actuaciones delictivas del Banco de España

Veamos las principales actuaciones delictuosas del Banco de España para asegurar que ese bloque de poder omnímodo permaneciera y permanezca incontrolado:

1.-  En mayo de 2006, los inspectores del Banco de España advierten al gobernador, el indigno Caruana, en un escrito de cuatro páginas de su “complaciente lectura de la situación económica española” está iniciando el camino al desastre. En dicho escrito llamaron la atención sobre la irresponsabilidad de consentir a bancos y cajas la concesión créditos al sector inmobiliario sin cobertura de solvencia contra la expresa prohibición del reglamento del Banco de España. Gravedad rayana en lo criminal si tenemos en cuenta que los créditos eran concedidos no con recursos propios, sino con un endeudamiento exterior masivo.

En 2011, Zapatero afirmó que “ni siquiera el FMI pudo prever la crisis”. ¿Y qué fue entonces la carta de los inspectores del Banco de España cinco años antes? El susodicho Caruana, que ya estaba haciendo las maletas, le hizo llegar el citado documento al ya designado sucesor  Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO). Este lo tiró a la papelera sin exageración retórica, ese desprecio a la norma era flagrantemente ilegítimo. Por cosas menos graves meten en la cárcel a cargos políticos en el mundo civilizado.

2.- En la primavera de 2007, el Banco de España y el abyecto Solbes perpetraron una de las mayores felonías de nuestra historia económica. Sabiéndolo falso –The Economist y FT afirmaban entonces que los pisos en España estaban sobrevalorados en un 30%– incitaron a la gente a comprar porque “los pisos nunca pueden bajar de precio, sólo subir”. Por ello, “cuanto más se endeuden las familias más ricas serán”.

3.- En agosto de 2007 estalla la crisis financiera internacional. El Banco Central Europeo convoca en una reunión de urgencia a los gobernadores de los bancos centrales de la Eurozona para buscar soluciones al desastre. Asisten todos menos MAFO, que está de vacaciones y no le da la gana interrumpirlas.  El 12 de agosto, el otro irresponsable absoluto, Solbes, afirmó que la crisis financiera no tendría efecto alguno sobre nuestro país. Siendo España el país más endeudado del planeta, esta afirmación era directamente de cárcel.

4.- En los meses anteriores a las elecciones generales de marzo de 2008, el mundo entero estaba en recesión. ¿Todo? No, un país llamado España resistía contra todos como el poblado de Astérix. No tenían la poción mágica, pero tenían a MAFO, que aseguró dos semanas antes de las elecciones que la economía española había crecido un 0,8% en el cuarto trimestre de 2007, frente al 0,7% el trimestre anterior.  Zapatero había obrado el milagro, ¡la economía española estaba creciendo, no hundiéndose como el resto del mundo! O sea, no había ninguna crisis. Seis meses después, el Banco de España rectificaría: la economía estaba cayendo en 2007, no subiendo.

En los meses y años siguientes, el Banco de España –sirviendo a los cuatro pilares del poder omnímodo y en contra de los intereses más elementales del pueblo español– no dejaba de hacer trampa, ocultación, cambios normativos o manipulación grosera para engañar a los ciudadanos y a los agentes económicos, hasta el punto que la credibilidad del Banco de España y del INE en los medios internacionales es de absolutamente cero. Como decía el anterior presidente del BCE, “las estadísticas españolas son muy difíciles de creer”.      

6.- Pero tal vez la actuación más inicua que ha llevado a la ruina a decenas de miles de familias humildes ha sido la estafa de las preferentes. El sistema financiero, al que el poder omnímodo y los medios denominaban “el más sólido del mundo”, estaba quebrado y fuertemente infra-capitalizado a causa de la delictiva permisividad del Banco de España, autorizando al sistema financiero endeudarse a dos años y prestar a 30. Para capitalizarlo, el Banco de España puso en marcha un plan diabólico que implicaba el engaño y la ruina de todos los pequeños ahorradores. Se trataba de la emisión de deuda perpetua subordinada a todas las demás deudas, ¡o sea, que todas la demás serían pagadas antes!, y con pago de intereses condicionado a tener resultados positivos el acreedor. Y a esta macro-estafa la denominaron “emisión de preferentes”.

Se trata de la primera estafa masiva urdida en las más altas instancias financieras del poder contra las capas más débiles e indefensas de la población, como los ahorradores jubilados que necesitaban ese dinero para su supervivencia, bajo el señuelo de seguridad, alta rentabilidad y liquidez, y colocado engañosamente por las redes de sucursales del sistema bancario, cuando, en realidad, la medida que se tenía que haber tomado era la misma que en EEUU y Gran Bretaña, capitalizando el Estado y devolviendo después el dinero los bancos como han hecho ya todos los americanos y británicos.

Aquí se ha urdido y perpetrado la mayor estafa de la Historia de España, unos 30.000 millones de euros, por las personas cuya obligación esencial era vigilar el sistema para proteger a los más débiles del engaño de los más fuertes, en concreto  los gobernadores del Banco de España, Caruana y Fernández Ordoñez, y los directivos de la CNMV, Conte y Segura. De haber estado en un país decente, estos siniestros personajes dormirían desde hace tiempo en Soto del Real.

Más de 300.000 millones. Y la banca sigue siendo insolvente

El volumen de dinero público –FAAF, FROB, esquema de protección de activos, Sareb, avales, etc.– empleado en el rescate de la banca española ha sido el mayor del mundo desarrollado: más de 30% del PIB oficial y el 37,5% del PIB real. Y lo que es infinitamente peor: el único país del mundo donde las pérdidas para los contribuyentes van a ser colosales, más de 50.000 millones hoy y hasta 180.000 millones a medio plazo según el FMI (Informe Agosto 2013).

Las preferentes han sido la estafa masiva urdida en las más altas instancias financieras del poder contra las capas más débiles e indefensas de la población, como los ahorradores jubilados que necesitaban ese dinero para su supervivencia. Sareb es un desastre total donde se perderá más de la mitad del dinero inyectado, y algunos casos son alucinantes. Por ejemplo, el de Florentino Pérez. Está fuertemente apalancado con el Banco de Valencia –vendido a La Caixa por un euro–,  y cuya deuda podría haber entrado, gracias a la decisión de la cúpula de La Caixa, en el esquema de protección de activos. Si esto hubiera sido así, la deuda del Sr. Pérez la pagaríamos todos los españoles. 

Ninguno de los culpables de este saqueo sin precedentes de las arcas públicas ha sido ni procesado ni encarcelado. Luis de Guindos afirmó con un cinismo y una desvergüenza total en mayo de 2013 que “el rescate bancario no costará un solo euro a los contribuyentes”. Y, como premio, Rajoy le acaba de “comprar” una poltrona en Bruselas que nos costará 500 millones de dólares (me refiero a los 1.098 millones de dólares que Rajoy ha comprometido con la dueña de la UE, Sra. Merkel, quien le ha concedido dos poltronas, para la ayuda a los nazis de Kiev). ¿Y dónde estamos hoy? Nada mejor que reproducir lo que piensan el BCE y Bank of America Merrill Lynch en su análisis del pasado día 13 titulado Bancos españoles: balances bajo sospecha:

“Creemos que el sistema financiero español como conjunto tiene una cantidad significativa de activos problemáticos, tanto en términos relativos como en términos absolutos”. “Estimamos que los créditos dudosos (NPL) en España ascienden al 41 % del PIB oficial (423.000 millones de euros), con sólo el 44% de cobertura”. “Aparte, la magnitud en términos absolutos y relativos, a primera vista, da la impresión de que las coberturas son insuficientes”. “El ratio de créditos dudosos a grandes empresas crecieron fuertemente desde el 18% en junio al 19,8% en septiembre, y a los individuos, del 5,6 al 6% “. “Los NPL crecieron un 2,4% en diciembre (frente al 1,8% en noviembre) según el Banco de España”, es decir que el problema está empeorando, no mejorando. “Sin embargo, las provisiones no han seguido una trayectoria similar, sino a la inversa. Cayeron un -2% intermensual en diciembre y -3% interanual, a pesar del incremento de los NPL”. El Banco de España en acción, al servicio de las oligarquías.

El pasado 6 de marzo, el presidente del BCE afirmó refiriéndose implícitamente a España: “Lo peor que uno puede pretender es que los problemas no existen. Si algo hemos aprendido de Japón entre 1990 y 2000 es que los bancos zombis no prestan. El único camino posible es realizar una cirugía a fondo”. “Una de las razones por las que desconfiamos de los bancos españoles es la gran cantidad de cosas que se deberían haber arreglado y no lo han sido, justo al contrario que en Irlanda, donde el empleo está creciendo con fuerza, la deuda pública cayendo y el precio del inmobiliario subiendo. En España los NPA siguen subiendo y el precio de las viviendas bajando”.

El viernes, Eduardo Segovia publicó en estas mismas páginas que “el BCE no se fía de las valoraciones de los activos inmobiliarios de la banca realizados por Oliver Wyman en 2012”, que nos costaron un ojo de la cara. Que las “autoridades europeas cuestionan las valoraciones inmobiliarias realizadas en el rescate de la banca española”. Según ellos, el descuento real para los pisos debería haber sido del 75% y no del 50%, o sea que estos malhechores que nos gobiernan han robado al pueblo español 25.000 millones de euros; sólo en Sareb y sólo para empezar.

Y las preguntas son: ¿hasta cuándo el pueblo español será capaz de tolerar este expolio a él mismo, a sus hijos y a sus nietos? A quienes han arruinado sus vidas y su futuro. Tardarán decenios en pagar esta orgía de malversación en beneficio de las cajas alemanas, francesas y holandesas que tan irresponsablemente prestaron su dinero a unos malversadores sin escrúpulos. ¿Hasta cuándo existirán españoles que sigan apoyando con su voto al PP o al PSOE, colaboradores de su propia ruina y de la quiebra de España? ¿Cuándo los responsables de esta felonía podrán ser procesados y encarcelados? Ni España ni los españoles podrán olvidar ni perdonar.  

jueves, 6 de febrero de 2014

¿Por qué no mejora el empleo?


Artículo de Juan Torres López, de fecha 5 febrero 2014 en diario Público

Los datos de paro registrado que acaban de darse a conocer vuelven a mostrar —diga lo que diga el gobierno— que empeora el empleo en España. Es cierto que el paro aumenta en menor medida que en meses de enero anteriores, pero eso no ocurre porque haya más facilidades para encontrar trabajo sino porque aumentan los desanimados y se expulsa a gran cantidad de personas del mercado laboral, bien por desánimo, bien porque son inmigrantes que ya abandonan España o españoles que tratan de encontrar nuevas oportunidades fuera de su país.

Y lo peor es que este empeoramiento es inevitable y que va a seguir produciéndose en el futuro porque las políticas que se vienen realizando no aportan lo que resulta esencial en cualquier economía para que las empresas puedan generar inversión productiva y empleo. A mi juicio, en España se carece hoy día de seis condiciones básicas e imprescindibles para crear puestos de trabajo.

La primera es la financiación. Gracias a su enorme poder político los banqueros han impuesto un rescate muy costoso de sus entidades que les ha permitido ocultar su quebranto patrimonial y volver a obtener beneficios suculentos pero sin que hayan vuelto a financiar a la economía.

El llamado rescate de la banca es un escándalo que no ha servido para recuperar la financiación. Se ha tirado de la manta que cubría las vergüenzas financieras acumuladas en los últimos años por las cajas de ahorros para disimular la responsabilidad general, pero lo cierto es que si se hubiera tirado al mismo tiempo de la que cubre al resto de las entidades financieras los resultados hubieran sido parecidos. Es el sistema financiero en su conjunto y no solo las cajas, el que está repleto de activos tóxicos derivados de haber financiado sin escrúpulos ni responsabilidad la anterior burbuja financiera. Lo que se está haciendo es limpiar el segmento de mercado que ocupaban las cajas para que lo ocupen los grandes privados y así puedan recobrar más o menos su equilibro patrimonial, hoy día disimulado por las normas de contabilidad aprobadas por las autoridades con el fin de evitar que aparezcan como lo que son —bancos zombis— y puedan registrar beneficios a pesar de que apenas sí desarrollan negocio bancario. Pero a ese paso la financiación tardará años en recuperarse.

Mientras no se ponga de verdad en claro su situación y mientras no se garantice que fluya financiación suficiente y barata a las empresas y familias es materialmente imposible que se pueda crear empleo. Lo que ocurrirá, por el contrario, será que sigan quebrando y despidiendo trabajadores o, a lo sumo, utilizando la última reforma laboral para abaratar sus plantillas y así poder seguir malviviendo.

La segunda condición imprescindible para crear empleo y que falta también en España es la demanda. O, dicho de otra forma, ingresos suficientes para que la población compre los bienes y servicios que producen las empresas. En los dos años de gobierno de Rajoy el consumo privado se ha desplomado como consecuencia de la pérdida de ingresos salariales y, en general, de renta disponible de las familias. Y eso no puede traducirse sino en una pérdida de demanda para todas las empresas (las grandes han visto reducir sus ventas entre un 40% y un 50% desde 2008) y, en particular y de forma más grave, para las pequeñas y medianas.

Argumentar que lo que hace falta para crear empleo es más flexibilidad y costes laborales más reducidos es una falsedad que solo sirve para que las grandes empresas que dominan el mercado sea como sea (porque son multinacionales que operan en muchos países u otras que tienen demanda cautiva) tengan beneficios extraordinarios. Denles ustedes clientes y ventas elevadas a las empresas y comprobarán que contratarán empleo sin problemas de flexibilidad alguno. Por tanto, mientras sigan bajando los salarios no se creará empleo en España.

La tercera condición es disponer de uno o varios sectores de actividad que actúen como motor de la economía en su conjunto y que tengan gran capacidad de multiplicar el empleo e ingresos a su alrededor, algo para lo que no sirve cualquier tipo de actividad.

En contra de lo que se viene diciendo, no basta con que aumente el PIB para que se cree empleo y mucho menos para que éste sea de calidad y acompañado de ingresos suficientes. Además de generarse actividades sostenibles, que no terminen cayendo más pronto que tarde (como pasó y sucedería de nuevo con la construcción) es necesario que se vertebren y constituyan tejido e interrelaciones adecuadas y que, además de tener fuerza suficiente como para tirar de toda la economía (lo que, por cierto, no le ocurre al sector exterior), nutran sobre todo al mercado interno y no externalicen ni el ingreso ni el valor añadido que generen.

Mientras no se consolide otra forma de producir y de consumir en España, no se podrá crear empleo suficiente en nuestra economía.

La cuarta y la quinta condición quizá puedan sorprender a quienes están habituados a oír hablar de empleo y economía como si fueran mecanismos de relojería que nada tienen que ver con las personas y su diferente posición en la sociedad. A los pocos días de ser nombrado vicepresidente económico del gobierno, el profesor Fuentes Quintana compareció en TVE en hora de máxima audiencia para hablarle a los españoles de 1977 sobre la situación económica de aquel momento. Sus primeras palabras fueron exactamente estas:

“Las soluciones de los problemas económicos nunca son económicas sino políticas. No hay oscuras fórmulas técnicas que permitan resolver las dificultades en un clima de gabinete. Los problemas económicos de un país solo pueden superarse mediante el esfuerzo y la colaboración de todos (…). Sé, desde luego, que solo puede esperar esa colaboración un gobierno en quien ustedes confíen como veraz y que les merezca credibilidad”.

Pues bien, esto último también nos falta: un gobierno veraz, creíble y en quien confíe la gente.

Desde que la crisis comenzó a notarse en España con Rodríguez Zapatero en el gobierno, los españoles no hemos recibido sino mentiras sobre la situación económica y eso ha hecho que la confianza en nuestras autoridades esté bajo mínimos. Y así, por mucho que se quiera, es imposible que se genere la voluntad colectiva y el esfuerzo mancomunado que es necesario para sacar adelante una situación tan difícil como la que tenemos.

Finalmente, también carecemos de instituciones que canalicen las preferencias ciudadanas, que equilibren los poderes y que hagan posible el gobierno eficaz, controlado y transparente. Y, sobre todo, que estén obligadas a poner en marcha que la población quiera que se lleven a cabo para que así las pueda hacer suyas y apoyar con el máximo empeño

La servidumbre de los grandes partidos hacia los poderes económicos es total y eso ha corrompido las instituciones. Ni uno solo de los partidos (desde el PP a IU pasando por los nacionalistas) carece de imputados por corrupción y todos ellos han estado presentes y han sido cómplices, por ejemplo, de la vergonzosa gestión de las cajas de ahorro. Ni una sola autoridad —empezando por el monarca y siguiendo por la judicatura, la fiscalía o el Banco de España— está libre de sospecha o no ha sido denunciada por actos indignos o por complicidad con los sinvergüenzas que han provocado la situación en la que estamos. Ninguna de las estafas ni de los casos de corrupción que hemos sufrido se hubieran producido o hubieran adquirido la dimensión que han alcanzado si todas esas instituciones hubieran sido diligentes y si sus responsables o titulares se hubieran comportado con honestidad.

Hablando en plata, en España tenemos una democracia de cada vez más baja intensidad: los bancos y grandes empresarios controlan los medios de comunicación, hay un pacto de silencio sobre los grandes escándalos, los jueces que actúan contra los oligarcas son los que resultan perseguidos y expulsados y el gobierno da órdenes a la fiscalía para que no se persiga a los grandes ladrones y corruptos o los indulta si no ha habido manera de librarlos antes.

¿Cómo va a salir de la crisis un país cuyo jefe de Estado está más pendiente de disimular el enriquecimiento y mal comportamiento propio o de sus familiares o de lavar la cara y engrosar la cartera de las grandes empresas que de evitar que sus conciudadanos más desfavorecidos pierdan un derecho detrás de otro?

La sexta y última condición es disponer de suficiente capacidad de maniobra para poder poner en marcha las medidas que pueden ayudar a que todo lo anterior se resuelva. Y resulta que España no la tiene. No porque formemos parte de una unión monetaria superior, porque eso simplemente debería dar lugar a que la capacidad de maniobra radicase en otro lugar. Sino porque ésta unión está diseñada precisamente para evitar que los gobiernos o los pueblos dispongan de ella. Por eso no nos conviene, porque sin posibilidad de poner en marcha la voluntad propia, con las manos y los pies atados y sujetos simplemente al dictado de unos pocos grupos de poder que no están nunca presentes en las instituciones representativas, es imposible tomar medidas y tratar de cambiar el rumbo de las cosas. Mientras sigamos en esta Europa, mientras no demos un golpe en la mesa y hagamos ver que así no seguimos con la señora Merkel y compañía, no se creará empleo en España.

Sin libertad y sin disponer de soberanía es imposible que nadie salga adelante. Y lo que supone una paradoja bien significativa es aquellos que tienen constantemente en su boca discursos patriotas y grandilocuentes menciones a la Patria la hayan convertido en una vulgar esclava de los poderes financieros más antipatriotas y corruptos.

El gobierno y su partido, los banqueros y los dirigentes de la patronal podrán decir lo que quieran pero mientras no se pongan en marcha reformas de regeneración económica y política que resuelvan estas cinco carencias será imposible que se vuelva a generar empleo suficiente y de calidad en España.

martes, 28 de enero de 2014

Podemos: una propuesta imprescindible


Juan Torres Lopez, publicado en su blog 26 enero 2014.

La propuesta de un amplio grupo de personas encabezado por Pablo Iglesias bajo el lema Podemos me parece que supone un golpe de aire fresco y un revulsivo muy importante para promover la unidad ciudadana,  imprescindible para frenar los ataques a los derechos y los recortes sociales que estamos sufriendo.

Es lógico que pueda haber divergencias en algunos de sus planteamientos, o más o menos simpatías personales. Pero eso me parece que es lo de menos. A mí, por ejemplo, me hubiera gustado que viniese con pronunciamientos más concretos no solo sobre lo que hay que hacer en España sino, sobre todo, en Europa, pues al fin y al cabo, se presenta como una propuesta de cara a las elecciones europeas. Pero supongo que podrán ir haciéndose en el futuro inmediato y de manera común.

Comparto con sus promotores la idea de que estas elecciones son fundamentales. Nadie es tan simple como para pensar que solo con éxitos electorales se puede transformar la sociedad. Es preciso, además y sobre todo, que una gran mayoría social se empodere y ejerza su capacidad de decisión frente a los grupos que hoy deciden por todos. Pero es igualmente evidente, o al menos así me lo parece a mí, que si no se ocupan las instituciones con el apoyo de esa gran mayoría, tampoco puede lograrse ningún tipo de transformación. Por muchas que sean las huelgas y movilizaciones, si los de arriba siguen disponiendo del Boletín Oficial de Estado y tomando decisiones, seguiremos perdiendo derechos y bienestar porque nos gobernarán a su antojo.

Las elecciones europeas de mayo son muy importantes por ambas razones. Porque pueden servir para movilizar y avanzar hacia el el empoderamiento de la población y porque pueden permitir que se ocupen instituciones que ahora van a tener mucha más capacidad para frenar o impedir el daño que están produciendo las políticas dominantes.

Coincido también con la idea de que será muy difícil, por no decir imposible, que se consigan resultados electorales capaces de avanzar en esa dirección si no hay candidaturas unitarias y si éstas, en lugar de representar viejas formas de hacer política, no se identifican con la indignación y el rechazo de la mayoría de la sociedad hacia la forma en que hoy día se vienen gestionando los asuntos públicos. Un rechazo que es tan frontal que implica que ninguna fuerza política contaminada de lo viejo va a poder ser capaz de regenerar, como es necesario que ocurra, la vida social y económica.

Y sobre todo coincido en la convicción de que la única forma de promover candidaturas de esa nueva naturaleza y demostrar que efectivamente lo son es convocar elecciones primarias abiertas.

¿Cómo se puede decir a la ciudadanía que se ofrece un nuevo modo de representación y de hacer política si al final son los aparatos de siempre los que nos imponen la cara y el curriculum de nuestros representantes?

Es verdad que, antes que nada, hay que ponerse de acuerdo en qué medidas se defienden y en qué programa común se asume, pero basta con echar un simple vistazo a los documentos que se vienen elaborando, no solo desde la izquierda sino por cualquiera que de verdad quiera una auténtica democracia y bienestar social para España, para darse cuenta de que establecer los puntos de acuerdo no es un problema mayor.

Avanzar hacia ese programa de acción, algo que tampoco puede ser ajeno al debate abierto y participativo, es una tarea urgente pero igualmente lo es, y me atrevería a decir que incluso aún más, promover nuevos liderazgos y empoderar a personas que vengan a proporcionar aire nuevo a las instituciones y a la representación popular. Algo que se puede conseguir si se convocan las primarias que propone Podemos.

¿O es que de verdad hay otra alternativa para visualizar la amplia gestación ciudadana de cualquier candidatura y para que se revelen las preferencias ciudadanas sobre el nuevo tipo de personas que quiere como representantes?

En estos momentos hay varias opciones políticas que proponen el encuentro y la convergencia, la unidad frente a la agresión que sufrimos: una organización política muy importante, Izquierda Unida, y algunas otras que se van abriendo paso, además de plataformas diversas que proponen lo mismo. Todas ellas y sus dirigentes y responsables tienen ante sí una responsabilidad muy grande.

Es imprescindible que se convoquen cuanto antes y que acuerden la unidad de acción que pase por acuerdos programáticos fundamentales, la puesta en marcha de nuevas formas de organización desde la base y la convocatoria de elecciones primarias abiertas.

No se trata de sustituir la iniciativa de ninguna de ellas. Cada una puede y debe dar los pasos que mejor considere para proponer ideas, políticas y personas que puedan optar a ser candidatas. Se tratar de salir de su espacio para ir al universo de la ciudadanía que es mucho más amplio y que integra a todas las sensibilidades, ideologías y posiciones políticas, variadas pero con el común denominador de querer acabar con todo lo terrible que está pasando.

Los responsables de todas esas organizaciones y plataformas tienen ante sí un dilema fundamental: deberse a sus aparatos o a la ciudadanía. Habría que pedirle cuentas si no dan pasos visibles, concretos, efectivos y urgentes para poner en marcha esas candidaturas de nuevo tipo sin las cuales solo se conseguiría, si acaso, alguna que otra victoria precaria e incluso pírrica.

Agradezco a los promotores de Podemos y concretamente a Pablo Iglesias su propuesta y generoso ofrecimiento y los animo a no caer en la tentación de crear un espacio más, sino de exigir la convergencia de todos los existentes.

Como ellos dicen, ¡Podemos!

lunes, 27 de enero de 2014

ASÍ NOS VEN EN ALEMANIA



La verdad sin disimulos.

Traducción, reducida, de un artículo publicado el jueves 6 en varios periódicos económicos alemanes, por Stefanie Claudia Müller, su corresponsal en España:

En Alemania crece la crítica contra la supuesta "mentalidad de fiesta" de los españoles; en España los medios cada vez son más negativos con la supuesta dureza de la canciller Merkel. Pensamos que la situación es mucho más compleja de lo que presentan ambos gobiernos y la mayoría de los medios. España no es Grecia, pero España puede ser un paciente crónico si Alemania, junto con Europa, no contribuye a solucionar sus verdaderos problemas.

España no debería recibir más dinero sin que se cambie a fondo el sistema político y económico, hoy en manos de una oligarquía política aliada con la oligarquía económica y financiera, y sin que se aumente la participación ciudadana real en las decisiones políticas .

Las razones verdaderas de la crisis del país, nada tienen que ver con salarios demasiado altos -un 60 % de la población ocupada gana menos de 1.000 euros/mes, ni pensiones demasiado altas -la pensión media es de 785 euros, el 63% de la media de la UE-15- ni pocas horas de trabajo, como se ha trasmitido a veces desde Alemania. A España tampoco le falta talento, ni capacidad empresarial ni creatividad. Tiene grandes pensadores, creativos, ingenieros, médicos excelentes y gestores de primer nivel.

La razón de la enfermedad de España es un modelo de Estado, fuente de todo nepotismo y de toda corrupción, impuesto por una oligarquía de partidos en connivencia con las oligarquías financiera y económica, y con el poder judicial y los organismos de control a su servicio. En España no existe separación de poderes, ni independencia del poder judicial, ni los diputados representan a los ciudadanos, solo a los partidos que los ponen en una lista. Todo esto lleva también a una economía sumergida que llega al 20% del PIB y que frena la competencia, la eficacia y el desarrollo del país. Además, detrae recursos con los que podrían financiarse educación y sanidad.

Las ayudas para España, igual que para otros posible candidatos de rescates, no deben ir a bancos ya casi en bancarrota y fuertemente politizados. En la CAM, el Gobierno ha comprometido 16.000 millones de dinero público en lugar de cerrarla; en Bankia, 23.000, y el Ejecutivo acaba de darle 5.000 millones urgentemente para cubrir pérdidas en vez de cerrarla, y además de forma tan extraña que despierta todo tipo de recelos.¿Por qué se ha utilizado el dinero de los españoles (FROB) en vez de esperar los fondos de la UE? Es lícito suponer que la razón es la siguiente: los bancos no quieren que la UE investigue sus cuentas.

Control estricto y duras condiciones. Esas condiciones no pueden solamente representar recortes sociales o subidas brutales de impuestos, como hace ahora el Gobierno de Mariano Rajoy con la excusa de Europa . Se tiene que cambiar más en España que cortar gasto social, que de todos modos es mucho más bajo que en Alemania, y hay otros gastos infinitamente más relevantes que se pueden eliminar. Además, los casos de corrupción resultan tan escandalosos, incluso en el propio Gobierno, que uno solamente puede llegar a una conclusión: el dinero de Europa no puede ser manejado por personas tan increíblemente corrompidas.

La pasada semana el ministro de Industria Soria -imputado también por corrupción urbanística en Canarias- acusó al ministro de Hacienda en el Consejo de Ministros de favorecer descaradamente a la empresa líder de renovables, Abengoa, de la que había sido asesor, en la nueva regulación de estas energías, que reciben más de 7.000 millones de euros de subvenciones anualmente. Y Rajoy, al que entregó una carta probatoria, ni dijo ni hizo absolutamente nada.


Los últimos datos de las cuentas públicas conocidos la pasada semana son escalofriantes. El déficit del Estado a julio ascendió al 4,62% del PIB, frente a un déficit del 3,5% comprometido con la UE para todo el año (del 6,3% incluyendo regiones y ayuntamientos). Pero lo realmente inaudito es que España está gastando el doble de lo que ingresa. 101.000 millones de gasto a julio frente a 52.000 millones de ingresos.

El tema del déficit público es algo que roza la ciencia ficción, y que ilustra perfectamente la credibilidad de los dos últimos gobiernos de España.

En noviembre de 2011, el anterior Gobierno dijo que el déficit público era del 6% del PIB; a finales de diciembre, el nuevo Gobierno dijo que le habían engañado y que el déficit era superior al 8%, y que se tomaba tres meses para calcularlo con toda precisión. A finales de marzo, se dijo que definitivamente era del 8,5%, y ésta fue la cifra que se envió a Bruselas. Dos semanas después, la Comunidad de Madrid dijo que sus cifras eran erróneas y el Ayuntamiento de la capital igual… el déficit era ya del 8,7%.

Sin embargo, el INE dijo que el PIB de 2011 estaba sobrevalorado y, con la nueva cifra, el déficit era del 9,1%; dos días después, Valencia dijo que su déficit era de 3.000 millones más; o sea, que estamos en el 9,4% y las otras 15 CCAA y 8.120 ayuntamientos aún no han corregido sus cifras de 2011. Lo único que sabemos es que están todas infravaloradas. El déficit real de 2011 puede estar por encima del 11% , por lo cual en 2012 se está gastando el doble de lo que se ingresa. Como dice el Gobierno de Rajoy, “estamos en la senda de convergencia”. Y es verdad… de convergencia hacia Grecia.

Claramente, la joven democracia española tiene todavía muchos déficits de representatividad y de democracia que deberían interesar a la canciller Merkel y también a Europa, si queremos evitar una Grecia multiplicada por cinco y salvar el euro. Esto es lo que ha hecho posible el despilfarro masivo de las ayudas europeas, con una asignación disparatada de las mismas, a pesar de que estas ayudas han supuesto una cifra mayor que la del Plan Marshall para toda Europa.

Es frustrante que a causa de este sistema oligárquico nepotista y corrupto se destroce talento y creatividad y que ahora muchos jóvenes se vean forzados a trabajar fuera, muchos en Alemania. Esa situación nos ha llevado a una distribución de riqueza que es de las más injustas de la OECD.La antaño fuerte clase media española está siendo literalmente aniquilada.

Resumiendo: no es una falta de voluntad de trabajo, como se piensa tal vez en algunos países del norte de Europa, lo que hace que España sufra la peor crisis económica de su Historia. Es un sistema corrupto e ineficiente. La crítica del Gobierno alemán y sus condiciones para un rescate de España se deberían concentrar en la solución de esos problemas. En caso contrario, solo conseguirán que una casta política incompetente y corrupta arruine a la nación para varias generaciones.

*Stefanie Claudia Müller es corresponsal alemana en Madrid y economista.

DIFUNDE!!!!!!!

 

jueves, 19 de diciembre de 2013

¿Es legal el sistema hipotecario español? Las dudas regresan.


Las dudas acerca de la legalidad del sistema hipotecario español vuelven a estar de moda.

El turno le ha tocado ahora al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de Marchena (Sevilla), que no está conforme con la previsión de la norma que limita los intereses de demora a 3 veces el interés legal del dinero -fijado este año en el 4 por ciento- y ha vuelto a acudir a la Justicia europea para comprobar que la Ley no vulnera los derechos que el Derecho Comunitario ofrece al consumidor.
 
El juez Ruiz de Lara no deja lugar a dudas: entiende que la Ley 1/2013 "no otorga la adecuada protección al consumidor, e impide la aplicación de la sanción de nulidad de la cláusula de interés de mora cuando sea abusiva". En su auto -dictado el 16 de agosto y que el Consejo General del Poder Judicial publicó ayer-, censura que la norma impone "una moderación de cuantía en cláusulas abusivas de intereses moratorios que no resulta conciliable con la obligación del juez nacional de declarar la nulidad de las cláusulas abusivas para protegerle".
 
Y ello a pesar de que la Ley 1/2013 introdujo, entre otras cuestiones, el control judicial de oficio ante posibles cláusulas abusivas en los procedimientos de ejecución hipotecaria, tal y como demandaba la Justicia de la UE. Así, para Ruiz la norma que el Ejecutivo aprobó, precisamente, para acallar las críticas del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) -plasmadas en su sentencia de 14 de marzo en la que aseguró que el procedimiento de ejecución hipotecaria español va en contra de la normativa europea, por no proteger suficientemente los derechos del consumidor- podría seguir violentando la Directiva 93/13/CEE sobre las cláusulas abusivas en los contratos celebrados entre consumidores y profesionales y la jurisprudencia del TJUE. Moderar una cláusula.
 
En consecuencia, también pregunta al TJUE si cuando un juez nacional aprecie la existencia de una cláusula abusiva relativa a interés moratorio en préstamos hipotecarios debería proceder a declarar su nulidad y su carácter no vinculante o, por el contrario, debe moderar la cláusula de intereses dando traslado al ejecutante o prestamista para que recalculen los intereses.
 
A este respecto, para el juez español, de aplicarse la Disposición Transitoria Segunda de la Ley, que es la que impone la aplicación del citado límite a los intereses de demora para los que se devenguen con posterioridad a su entrada en vigor, "se obligaría al Juzgado a moderar una cláusula de interés de mora abusiva que en modo alguno puede vincular al consumidor". En su opinión, y en base a la jurisprudencia del TJUE, declarada abusiva una cláusula relativa a los intereses moratorios reclamados, ésta "sería nula de pleno derecho y se tendría por no puesta".
 
Y es que, sostiene que "queda vetada al juez nacional, por ser contrario al Derecho de la UE, la posibilidad de moderar los intereses moratorios" y, en consecuencia, "la cláusula habría de tenerse por no puesta, sin posibilidad alguna de integrar judicialmente el contrato". Por ello, considera que esta Disposición "supone un obstáculo para el ejercicio de acciones o recursos judiciales que garanticen la tutela efectiva y el control de oficio de las cláusulas abusivas por parte del juez nacional, como tiene establecido el TJUE (...) al imponer una suerte de moderación obligatoria de aquellas cláusulas de intereses moratorios que son abusivas". Jurisprudencia "tergiversada" Asegura Ruiz en su auto que la Ley 1/2013 tampoco otorga la adecuada protección al consumidor "de acuerdo con los principios de equivalencia y efectividad", al tiempo que "tergiversa de manera flagrante" la jurisprudencia comunitaria, "e impide la aplicación de la sanción de nulidad de la cláusula".
 
 El juez de Marchena ha planteado la cuestión prejudicial ante una ejecución hipotecaria del BBVA contra unos particulares, en cuyo contrato figura un interés de demora del 19% anual en caso de impago. El juez apreció entonces que ese 19% incluido como cláusula en el contrato suscrito es abusivo, por ser "del todo desproporcionado, incluso si se compara con otros intereses de la época en la que se firmó el contrato".

jueves, 31 de octubre de 2013

Una brecha legal permite arrebatar la hipoteca revendida a un fondo buitre


Artículo de Pilar Blázquez publicado con fecha 29 septiembre 2013.

 
El derecho de retracto permite a los endeudados recomprar su crédito con el mismo descuento con que lo ha adquirido el fondo buitre.

La ley es muy estricta y sólo da nueve días de margen para ejercer este derecho.

BFA-Bankia es una de las entidades que más créditos fallidos ha pasado al banco malo.

Cómo se alimentan los fondos buitre de los créditos basura de la banca española:

Los fondos buitre están de caza en España. Desde enero de 2012 hasta el pasado mes de agosto estos inversores internacionales se han hecho con la propiedad de 17.000 millones de euros de préstamos (al consumo e hipotecas) con problemas de impagos. Como ya contó eldiario.es, sus poderosas tácticas de negociación y unos cambios legislativos a su favor les han llevado a conseguir grandes descuentos de los bancos que en muchos casos superan el 80% del precio original de esos créditos. Un negocio redondo si consiguen, como suele ser habitual, que los deudores satisfagan sus deudas. Pero que se les puede complicar gracias a un resquicio legal que algunos abogados ya están aplicando.

¿Se imaginan plantarle cara a esos fondos y exigir que esa sustancial rebaja de su hipoteca se la apliquen a usted en lugar de a un fondo internacional? Pues aunque parezca ciencia ficción eso es posible ya que la legislación española ofrece una herramienta para hacerlo: el derecho de retracto. "Está recogido en el artículo 1535 del Código Civil. En él se reconoce el derecho del propietario de un crédito litigioso a extinguirlo por el mismo precio al que ha sido vendido", explica el abogado Antonio Valenciano, presidente de la Asociación Nacional para la Defensa Efectiva del Trabajador (Andet). Es decir, en el supuesto de que el crédito contraído con el banco fuera de 100.000 euros y el fondo buitre lo hubiera comprado con un descuento del 80%, el propietario podría saldarlo abonando esos 20.000 euros (el tema de las costas e intereses dependerá del criterio del juez) y el fondo internacional que lo compró se quedaría compuesto y sin crédito.

"La razón por la que se estableció esta posibilidad es que el sistema jurídico es contrario a la especulación con litigios y se querían evitar situaciones como lo que está ocurriendo ahora en la Sareb (el llamado banco malo)", asegura el abogado Fernando Zunzunegui.

Cómo hacerlo

Pero que sea posible no significa que sea fácil. Hay que cumplir una serie de requisitos y ser muy, pero que muy rápido en la toma y ejecución de las decisiones.

Por un lado, no todos los deudores pueden hacer esta reclamación."Para acogerse a este derecho, debemos estar ante un crédito litigioso", advierte Mercé Caral, socia del despacho Jausas Legal. Es decir, que deudor y acreedor estén enfrentados en los juzgados por el crédito en cuestión. El segundo de los requisitos es hacerlo en el plazo adecuado, que la ley fija en unos escasos nueve días naturales desde que el nuevo acreedor reclama la deuda.

Aquí es donde comienzan los verdaderos problemas. "La opacidad es la principal dificultad de este proceso. Hay centenares de miles de hipotecados que ni siquiera saben que sus deudas han sido vendidas a estos fondos internacionales", advierte Zunzunegui. En algunos casos, el banco español incluso sigue siendo el que pasa la cuota mensual de la hipoteca y todo transcurre como si no hubiera cambiado nada, como le ocurrió a un matrimonio de Vigo, cuya historia reflejó el diario Altántico.

En otros casos, la notificación llega camuflada y es difícil de detectar. Lo saben muy bien quienes a principio de la década de los 2000 tuvieron problemas por no pagar sus recibos de telefonía o hipotecas. Esto de los fondos buitres es menos novedoso de lo que parece. En aquel momento algunos de los fondos internacionales que ahora están comprando las carteras de deuda a la banca ya hicieron negocio en España, y no sólo con la banca, también con las empresas de telefonía. Es el caso de Aktiv Kapital o Oko Investment, entre otros. Entonces su modus operandi consistió en enviar la notificación a los morosos con tan poca información que muchos ni sabían a qué se refería, hasta que meses después, aprovechando que no habían reaccionado, les exigían una deuda mucho mayor.

Cómo enterarse

Ahora su actuación tampoco destaca por el fair play. "No se presentan con el nombre con el que se les identifica en la prensa. Suelen contratar a una empresa intermediaria de recobro  para hacer la gestión, como puede ser Cobralia. Además, la redacción de la nota es tan confusa que cuesta identificar que se refiere a un cambio de acreedor", explica Valenciano. Según este abogado, en muchos casos la notificación es un carta más entre la maraña de papeles que suele colarse en los buzones. Es decir, no llega ni certificada, ni por burofax, por lo que puede pasar inadvertida.

Identificar cuanto antes el momento en que se informa al deudor es la clave. Dado el escaso tiempo para reaccionar, lo ideal sería haber contactado antes con un asesor legal. En el caso de no que no se pueda certificar una fecha concreta, este será un argumento más para presentar al juez y, tal vez, poder alargar los plazos. El otro dato difícil de identificar es la cuantía del crédito final. La ley no obliga a informar en esta notificación sobre el precio al que se ha hecho la transacción entre el banco y el fondo internacional, "Todo apunta a que los descuentos han sido muy fuertes, por lo que el deudor puede saldar su hipoteca a precios realmente bajos", comenta Zunzunegui.

"El afectado nunca va a saber a priori cuál es el precio al que el banco y fondo de inversión han hecho la transacción. Por eso se solicita al juez que sea él quien la requiera ", apunta Valenciano. Hasta ahora tres de sus clientes, que no quieren ser identificados, han conseguido liberarse de sus créditos por esta vía.

Esos precios de derribo junto al factor tiempo son otro de los puntos fuertes para plantar batalla a los fondos buitres. "Enrocarse en un procedimiento judicial en España les rompe su estrategia de comprar barato y vender rápido para conseguir beneficios", explican fuentes  del sector financiero. Por ello, a pesar de su fama de duros negociadores, abogados y financieros coinciden en que no es el peor de los momentos para negociar. " Son más proclives a aceptar la dación en pago o una quita en la deuda, porque tienen más recursos para revender la vivienda y más margen que los bancos para negociar a la baja", asegura Mikel Echavarren, consejero delegado de Irea.

Eso sí, no conviene lanzar las campanas al vuelo, las posibilidades de triunfo son proporcionales al monto de la deuda contraída. "Es más fácil negociar cuando la deuda es muy importante que cuando es pequeña", advierte Mercé Caral.